Vertedero

Recuerdo perfectamente la época en la que tener un blog y contar partes de tu vida era la moda del momento, era la época perfecta para vagar en las sensaciones y pasatiempos de otros, de aprender y de dejar volar la imaginación para ponerse en los zapatos/tacones de quien escribía.

 Y ahora aquí estoy yo,  justo cuando se habla y se rumorea que este medio de expresión está por llegar a su fin, un domingo por la mañana cualquiera, decido abrirme uno  ¿porque? No lo tengo muy claro,  puede que sea  una manera de intentar  aclarar mi mente que esta tan dispuesta a vagar en todo y no  centrarse en nada o la necesidad absoluta que tengo en ocasiones de decir tantas cosas pero sin querer realmente ser escuchada. No quiero psicoanálisis, no quiero terapia, hoy domingo por la mañana, solo quiero  escribir, sobre todo, sobre nada, sobre lo importante, sobre lo irrelevante, pero sobre todo sobre MI . Sobre esta mujer joven que a veces esta tan perdida y que aparenta ser una mar en calma, que finge saberlo todo y  que en realizada no sabe nada.

Pero como era de esperarse, soy consciente de mi ignorancia y de que en  mi vida nada está en lo más  mínimo claro,  y me he creado un blog sobre ello,  sobre cosas que me pasan a mí, que pienso solo yo y que probablemente  a nadie más le importe, porque siendo sinceros no es como que este blog se vaya a llenar de cientos de comentarios, de personas interesadas en la inconformidad que me genera tener una nariz más grande que el promedio porque si, señores, aunque mi madre que es una santa lo diga, no tengo un perfil griego HOLLYWOODENSE y  hoy como estoy en mi blog y es mi espacio y no me van a caer a gritos todas las personas que consideran  que debo dejar atrás mi pequeña migaja de vanidad y  estar agradecida con el mundo por el mero hecho de estar viva, puedo admitir QUE NO ME GUSTA MI NARIZ.

X.