martes, 26 de agosto de 2014

UNA HISTORIA

Erase una vez una  historia de miedo,  del miedo que nos produce a algunos seres humanos iniciar una conversación con alguien que no has  visto en mucho tiempo. Del miedo infundado.

De casualidad encontré  por una red social a una persona que había conocido hace muchos años (más de cinco creo) de una manera muy fugas, que   me había causado una gran impresión pero  además había estado (sin saberlo ) en una de las etapas más oscuras de mi vida, no fuimos más que conocidos,  lo único que se de él es que me acompañaba hasta mi casa se despedía y no le volvía a ver sino al día siguiente con la misma rutina, pero él no sabía que el tiempo en el que caminábamos era uno de los más agradables o al menos eso recuerdo y era porque no hablábamos de casi nada, solo éramos dos niños que salían del instituto en silencio y llegaban a su destino en silencio, la diferencia era que yo no quería llegar a mi casa, y el tiempo caminado a su lado aunque fuera solo eso , caminando, me daba tiempo para respirar sin tener que pensar en nada. No obstante mi vida no cambio y un día en la mañana me desperté en medio de un ataque de ira y depresión,  compre un boleto de avión deje todo tirado y me fui del país para intentar dejar atrás todo lo que me lastimaba. (Error lo que te lastima si no lo enfrentas te persigue, el dolor, no tiene fronteras)

El caso es una de las únicas conversaciones que tuvimos y la razón por la  que más le recuerdo es por un spoiler,  recuerdo que en esa época salió el príncipe mestizo de J.K. Rowling  y este niño /hombre me hizo el spoiler universal  solo recuerdo que dijo “Dumbledore muere” y esa es creo, la única frase que tengo gravada de él, no sé si hablábamos de otras cosas, o si entrabamos en  detalles, solo sé que ese es el único recuerdo significativo que tengo de él.  

Navegando por redes sociales vi un nombre peculiar y di clic, sorpresa la mía que en la foto de presentación estaba la cara de ese pequeño troll  pero convertido en un hombre, dude y tuve miedo, quise decir algo y no pude,  no entiendo que es lo que te paraliza, que me avergonzaba, solo era  yo queriendo decir algo por ejemplo: hola. Pero no podía  así que me pregunte  ¿por qué tenía miedo y a qué? ¿A que no me recordara? Pero si es que yo tampoco lo recuerdo del todo. ¿A que me ignorara? Eso no es mayor conflicto.  El problema principal describí que es el miedo al rechazo, a no ser bien recibidos, a causar una mala impresión, porque vamos a ver estamos hablando de un hombre que vive a 14 horas en avión de mi lugar de residencia  y aun así yo tenía miedo, no puedo ser más tonta, lo sé, pero además estaba la cosas de que en mi cabeza había un adolescente y no me entraba que estuviera hablando con un adulto ya, es extraño esa percepción que dejan las personas y que no cambian a lo largo de los años, el caso es que luego de meditarlo mucho, me decidí  a decirle lo único que recordaba de él que era un TROLL evidentemente  él no sabe quién soy y yo la verdad es que no le puedo decir gran cosa porque tampoco lo recuerdo, la conversación solo llego hasta ahí, pero contrario de sentirme frustrada, me siento tranquila, me atreví y deje el miedo a un lado.

Así que me pregunto  ¿cuántas personas se habrán sentido igual alguna vez?, porque quiero pensar que no soy la única que tiene crisis  existenciales por desconocidos, de haber más personas que han sentido ganas de decir algo y no han tenido la valentía de enfrentarse a ello, a esos quiero decirles, que no hay nada que peor que la incertidumbre, que es mejor lanzarse a decir algo, que quedarse en silencio esperando a que simplemente nada pase. 


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